Primero de Abril de 2011



El último parte de la Guerra Civil Española, firmado por Franco, fue publicado el 1 de abril de 1939, día final de la guerra. Es extremadamente conocido en España. Este es el original del parte:



Fue leído esa misma noche, a la 23:15 horas, por el actor y locutor Fernando Fernández de Córdoba, con entonación y énfasis propios de la radiofonía de aquellos años.
Durante la Guerra Civil española, la radio del bando nacional, emitía todos los días el parte de guerra facilitado por el cuartel general de Burgos. Los informativos de Radio Nacional heredarían posteriormente el término y fueron conocidos popularmente como "el parte". Sólo las personas de avanzada edad siguen diciendo "oír el parte" para designar a oír las noticias por la radio.

Y es que la guerra civil es una llaga difícil de suturar.  Ciudades enteras (como  Guernica), fueron destruidas por las aviaciones alemanas, pueblos enteros sometidos bajo un diluvio de bombas. La guerra más cruenta y sanguinaria que conoce nuestra historia, dejo muertos, enfermedades, hambre, epidemias, reducción de la natalidad, cuatrocientos cincuenta mil exiliados, destrucción de infraestructura edilicia y de las comunicaciones. Una verdadera catástrofe económica, que llevó a la vuelta de una economía basada en la agricultura. Una guerra que trascendió las fronteras españolas, llegando a considerarse para muchos como el prólogo de la Segunda Guerra Mundial. Supuso una ruptura moral del país y marcó a varias generaciones por el sufrimiento y la represión de una larga posguerra.

Hoy, 72 años después, todavía resulta imposible para muchas personas borrarse de este bipartidismo, así la tradición familiar ideológica pesa en sus mentes como una autentica  religión, como si se tratará de un dogma de fé del que no debes preguntarte su veracidad, simplemente debes creer.

 Estamos en pie  el recuelo de  aquellos tres monstruosos y deformes años, los niños que cantaban el 'cara al sol' en los patios de la escuelas  los jóvenes de la posguerra, pero mayoritariamente estamos en pie  los hijos e hijas de la democracia, y entre éstos últimos todavía,  hay quienes no entienden que no quieras aceptar integramente  ni derecha ni izquierda, argumentando que esto no es posible. No es posible que sepas ver la paja de cada ojo, no es posible que sepas reconocer que se ve más y mejor con los dos ojos que con uno solo, no es posible que seas crítico y te cuestiones las erratas de todos, las tuyas propias y finalmente afirmes – Creí en ti, pero me has fallado; Creí en ti, pero nunca más porque me has defraudado.

Hasta cuándo vamos  a tirar de la cuerda en sentidos opuestos? La soltaremos algún día para conversar sobre qué necesitamos, qué podemos permitirnos, cuanto puede dar cada uno de nosotros/as, por dónde empezamos …..?

Nosotros/as ya lo hemos hecho, y esperamos que este año sea el año en que velezanos y velezanas dejamos de tirar de la cuerda para ponernos a trabajar con ella.

1º de Abril de 2.011